El campeonato de fútbol colombiano que se vio en la obligación de parar por la situación social del país, ha decidido reanudar con el compromiso pendiente por la vuelta de los cuartos de final entre el Deportes Tolima y el Deportivo Cali en el Atanasio Girardot.
Las barras ‘bravas’ han sido activistas de las manifestaciones en contra del gobierno colombiano y en el caso puntual de la del Deportivo Cali, equipo implicado en el partido y la del Deportivo Independiente Medellín, equipo de la ciudad donde se va a jugar, han manifestado su oposición públicamente, hasta que se normalice el orden público.
Ni las autoridades, entes reguladores o clubes se han pronunciado al respecto y el evento sigue pactado con la programación estipulada por Dimayor.